La piña es un símbolo antiquísimo de la naturaleza sagrada, identificada con la glándula pineal, llamada también tercer ojo, que corona las cabezas de dioses y santos, como el Buda o como Judas Tadeo. Simboliza la resurrección espiritual.
También es un símbolo cultural de la prosperidad y perpetuidad, en alusión a la abundancia de los conos de los pinos. Esto está acorde no sólo con lo prolífico de las coníferas, sino también con el hecho de que sus piñas (frutas) pueden aparecer en la estéril época del invierno. Además se considera un símbolo mágico y mitológico de inmortalidad y de vitalidad, en alusión al báculo del dios clásico Dionisio o Baco, llamado "tirso".
Esta vela representa todos los significados de la piña de pino y potenciará estas características cuando se encienda. Puede acompañar a cualquier petición para hacerla más próspera y trascendente, o encenderse sola.