Las pirámides dieron origen a infinitas leyendas.
Las cuatro esquinas representan silencio, profundidad, inteligencia y verdad.
El lado sur, simboliza "el frío", el norte "el calor", el este "la luz", y el oeste "la oscuridad".
Las caras triangulares representan las potencias del alma.
La pirámide posee los secretos de la transformación y gran potencial de energía.
Utilizamos polvos de plata y de oro para darle ese acabado brillante tan místico y cera de palma para elaborar las velas.